Pensar las pedagogías desde el Sur es un modo de emancipar, nuestra educación y cultura, de la visión colonialista y eurocéntrica. Esta gramática multicultural es política y se hace presente en las geonarrativas, que siendo amenazadas, refuerzan la idea de un saber libertario.
Por Carla Wainsztok* | Fotos: Sub Cooperativa de Fotógrafos, M.A.F.I.A y Andrés Álvarez
Pedagogías del Sur
Las pedagogías del sur están siendo una gramática ética y política. Acaso, ¿la pedagogía puede ser neutral? ¿La vida es neutral? ¿Podemos ser neutrales frente a las injusticias? Las vidas y las pedagogías. Pedagogías vitales. La vitalidad de las rebeldes y entrañables pedagogías.
Pedagogías éticas que piensan en cada singularidad, en cada rostro, en cada otredad. Pedagogías que no son individuales, ni individualistas. El individuo es una ficción. Una ficción contractual. El contrato social como ficción. Las singularidades se pluralizan cuando estamos juntas/os y se vuelven políticas. Las/los singulares y sus singularidades.
Las pedagogías del sur se realizan en las aulas, en las cooperativas, en los movimientos sociales e, incluso, en (algunos) Estados educadores plurinacionales. Las pedagogías como una gramática en construcción.
¿Cuánto tiempo lleva construir Estados educadores plurinacionales? ¿Cuánto tiempo lleva destruirlos? Derechos-deshechos. Desechar los derechos y los deseos. Las políticas educativas y las gramáticas pedagógicas. Las temporalidades de las políticas y las temporalidades de las pedagogías. ¿Quién narra nuestros derechos? ¿Las escuelas, los colegios, las universidades, no siguen siendo habitadas por el desconocimiento? Derechos, deseos y nombres propios. Derechos a las orquestas. Deseos de músicas. Pentagramar los anhelos.
Las educaciones y el don. El don que es dar no donar. Dar un tiempo y un espacio.Convidarnos tiempos y espacios. Tiempos y espacios esperanzadores. “Pedagogías de la esperanza”.
Convidar las promesas. Las promesas de los tiempos. Los tiempos de las promesas. Habilitar tiempos y espacios. Habitar otros tiempos y otros espacios. Una pedagogía generosa y también, hoy, de géneros.
Compartir nuestros saberes. Los conocimientos no son estancos. Los conocimientos están en movimiento. Los conocimientos tampoco son compartimentados. Si los conocimientos no se comparten no son conocimientos. Compartir entre generaciones, entre comunidades. Las transmisiones no son “transferencias bancarias”.
Las transmisiones como las maneras de compartir experiencias e historias. Estamos siendo entre transmisiones.Las transmisiones entre generaciones y comunidades. Las biografías se construyen entre comunidades, transmisiones y generaciones.
El corazón de las pedagogías del sur es una pregunta. ¿Quiénes estamos siendo? La inquietud de ser desde el sur. Desde el sur del ser. Ser el sur. Ser/sur. ¿Se puede enseñar que no estamos siendo? ¿Qué voz puede enseñar que no somos? Las voces y los argumentos. Los argumentos en las manos y en las bocas de los pueblos.
Las identidades están siendo complejas. Las lecturas entonces no pueden ser lineales. Las historias no son lineales. Navegar entre los ríos de nuestras historias. Nos gusta diferenciar entre historias y cronologías. Nuestras vidas para no ser simplemente cronológicas necesitan que las narremos, que las volvamos biografías. Biografiar entonces es narrar, escribir. Cuentan que Scherezade narraba para que no la mataran. No es cierto. Scherezade narraba para no desesperar. Las abuelas también cuentan y nos cuentan. Las existencias narradas. Narrar las existencias.
¿Cómo se relacionan nuestras biografías y las historias sociales?
¿Cómo nombrar lo que nos está sucediendo? ¿Colonialismo? ¿Neocolonialismo?
Colonizaciones y ¿nuevas colonialidades?
Nos gusta distinguir dos modos de la colonización:
-Colonización económica que se denomina expoliación y más cotidianamente saqueo. Economías del saqueo. Entregar los recursos naturales es una manera de desoberanizar la patria. Las patrias del Sur.
-Colonización pedagógica y cultural.
La colonización pedagógica es como una “sombra chinesca” que fascina, deslumbra y, entonces, imita a otras culturas. No se trata de negar Europa. En Europa hay obras de artes, textos, músicas que son patrimonio de la humanidad, de las humanidades. Legados y herencias que nos vuelven más humanas/os. Sí. Ponemos en cuestión una versión eurocéntrica del mundo.
Europa como centro es negar las posibilidades y las potencialidades de pensar desde el sur, de leer desde el sur. Crear nuestras narrativas. Si las geografías son dibujos de las tierras, las geonarrativas son los modos de leer y escribir “donde pisan nuestros pies”.
¿Cuándo nace la ficción de Europa como centro? Con la Conquista de América.
Con la Conquista se impone un modo de pensar e incluso de sentir. Colonialidades del ser. Colonialidades del saber.
Lo que la Conquista también nos dejó fue una gramática racial y racista. Las relaciones jerárquicas de amo y esclavo, superior e inferior, se transforman en razas superiores e inferiores.
Expulsar a las/os otras/os de sus lenguas. ¿Se puede deshabitar una lengua? Las lenguas, las existencias y las pedagogías. ¿Cómo narrar quiénes somos si se nos privan de las lenguas? ¿Civilización o barbarie?
Mejor construir otros logos que incluyan, en lugar de un pensamiento binario cuya primacía es un pensamiento complejo. Soberanías cognitivas y justicias cognitivas.
El derecho al conocimiento es también el derecho a conocer nuestros derechos.
Las ternuras que incluyen y, por eso, ponen en jaque a la pedagogía de la crueldad. Pedagogía que deshumaniza y es deshumanizante. Pedagogía que nace con el “Requerimiento”. El “Requerimiento” como una suerte de “primer manual escolar”. En la Metrópolis (España) se escribe un textojurídico, un texto negador y negacionista. Pedagogía binaria. ¿Alma o cuerpo? ¿Libros o alpargatas?
Pedagogías plurales. Libros y alpargatas y neetbooksy satélites. Artes y artesanías. Lenguas en plural. Pedagogías en plural. Inclusiones, igualdades y libertades.
La colonización cultural no es sólo negar nuestras historias, nuestras pinturas, nuestras músicas. Conservatorios varios. La colonización cultural también es“profetizar odios”.
Es que estamos hechos de historias y de pasiones. Los odios y los miedos. Los odios y los medios. Pasiones agrietadas.La pregunta no es: ¿cómo hacer pedagogías en estos días? La pregunta es: ¿cómo no hacer pedagogías en estos días?
Pedagogías que desnaturalicen, que problematicen las pasiones que están habitadas por los terrores.
Pedagogías de las curiosidades. ¿Cómo nos vinculamos con el mundo?
Las pedagogías y las lenguas nacieron para la vida, para las vidas. Las pedagogías de las ternuras como otro modo de estar en el mundo, de estar con el mundo. Estar en el mundo con otras/os. Estar en comunidad. Comunidades educativas. Comunidades pedagógicas. La comunidad no es necesariamente lo común. La comunidad es la mutualidad, la solidaridad. Desear estar y entrar en comunidad. Comunidades deseadas. Comunidades deseosas.
Pedagogía de las ternuras y las dignidades. Las dignidades rebeldes. Las dignidades que desean volver. “Arriba la luna volverá”.
Estos son días en que estamos movilizadas/os y conmovidas/os.
Estos son días en que estamos conmovilizadas/os.
Estos son días de agitar libertades. Liberaciones y descolonizaciones. Libros sí. Ternuras también.
*Socióloga Universidad de Buenos Aires (UBA). Profesora de Filosofía, Teoría Social Latinoamericana y Pedagogía, en la Facultad de Ciencias Sociales (UBA). Profesora de Pedagogía y Educación Social en la tecnicatura de Pedagogía y Educación Social, con orientación en Derechos Humanos, en la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE). Directora de la colección Pedagogías del Sur.